- Coge un balde o base grande y llénalo con agua fría o tibia. Tome un poco de detergente suave y agregue unas gotas al balde. Luego mezcle el agua con las manos para mezclar el detergente con el agua. Coloca el sari de seda en el balde y asegúrate de que todo el sari esté sumergido en agua. Deja el sari intacto durante 2 minutos para que pueda remojarse en la mayor cantidad de agua con jabón posible. Mueva el sari arriba y abajo en el agua de 4 a 6 veces, para que cualquier residuo o suciedad se elimine. Después de esto, saca el sari del balde y escurre el agua con jabón. Luego lave el sari con agua fría para eliminar el jabón. Asegúrate de cubrir todo el sari mientras lo lavas con agua fría. Lave el sari hasta que no quede ninguna pastilla de jabón. No retuerzas ni escurras las prendas.
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